El glaucoma es una enfermedad más frecuente y más levisa de lo que la mayoría de la gente cree. Además tiene un difícil diagnóstico porque apenas presenta síntomas. Por eso aprender a prevenirlo es la mejor de las soluciones para todos.
El glaucoma es una lesión de las fibras del nervio óptico producido por un aumento de la presión intraocular. Afecta al 2% de la población mayor de 40 años y al 14% de los mayores de 60 años, y es la segunda causa de ceguera en los países desarrollados.
El problema es que el glaucoma normalmente no produce síntomas, y la pérdida de visión periférica, que ocurre en estadios precoces, es muy difícil de detectar por los pacientes, por lo que solo la mitad de los que la padecen son conscientes de ello. Con los riesgos que eso implica.
Causas del Glaucoma.
Es importante prestar atención a las variables que contribuyen a padecer glaucoma. Los antecedentes familiares son, como en muchas otras enfermedades, el primer factor que hay que vigilar. Si en tu familia hay o ha habido personas con glaucoma deberías ir al médico a hacerte una revisión ya que el riesgo es 10 veces mayor que en otras personas.
Pero luego hay otra serie de factores que hay que tener muy en cuenta como son la diabetes, la miopía y la hipermetropía, el tratamiento prolongado con corticoides, la edad, la exposición al sol y el tabaquismo. Aunque el mayor impacto, nos lo dicen las estadísticas, es la edad.
Cómo prevenir el Glaucoma.
Hay tres cosas muy importantes que podemos hacer desde ya mismo: vigilar la dieta, tomar vitaminas y hacer deporte.
La Dieta:
Lo conveniente sería que te hicieras un estudio dietético para que sea un profesional quien te diga qué y cómo debes alimentarte para prevenir el glaucoma y que, al mismo tiempo, sea un buen complemento para tus necesidades concretas.
Las frutas y las verduras son los dos grupos de alimentos más importantes, y el azúcar el más dañino, por lo que reducir su consumo es fundamental. El alcohol, la cafeína y el tabaco son también elementos muy perjudiciales para el desarrollo del glaucoma.
Las vitaminas:
Esta totalmente relacionado con el punto anterior, la dieta. Y en el mismo estudio te pautarán también tus necesidades en este aspecto, pero algunas vitaminas son muy importantes y podemos encontrarlas en diferentes alimentos.
Las frutas amarillas y anaranjadas contienen carotenoides que pueden protegerte. Las hortalizas de hoja verde como la espinaca, la col rizada o la berza, el maíz, la calabaza, lo pimientos verdes y las yemas de huevo contienen luteína y la zeaxantina, que son importantes para la salud de la vista.
Las frutas y verduras con abundante vitamina C: cítricos, tomates, brócoli, fresas, el melón... Los que contienen vitamina E: huevos, cereales, frutas, trigo, nueces, aceites vegetales… Los que contienen vitamina A: hígado, zanahorias, mangos, leche o yemas de huevo. Con vitamina D: el pescado "graso", la leche los cereales fortificados o las yemas de huevo.
También son interesantes los alimentos con zinc: ostras, carnes rojas, aves de corral, nueces, ciertos mariscos, y los alimentos con ácidos grasos omega-3: salmón, sardinas o nueces.
El deporte:
Según las últimas investigaciones el ejercicio físico, el deporte, parece producir un beneficio a largo plazo. No se trata de empezar a hacer deporte ahora a lo loco, de hecho, si la enfermedad ha empezado a manifestarse, hay que vigilar la actividad evitando aquellas que requieren demasiado esfuerzo.
Pero estos estudios parecen demostrar que aquellas personas que habían realizado actividades físicas, moderadas, en los 15 años anteriores tenían un 25% menos de riesgo de desarrollar baja Presión de Perfusión Ocular (OPP), que es un factor que favorece el glaucoma.
Si quieres más información, si tienes dudas o si crees que puedes estar en una fase previa del glaucoma, no dudes en venir a la farmacia a preguntar. Te ayudaremos en todo lo que sea necesario y te informaremos de cómo tienes que actuar.
Porque con el glaucoma, no se juega.
